La casa italiana Bulgari se ha caracterizado desde hace muchos años por crear fragancias originales y de inigualable belleza. Goldea no es la excepción.
El perfume está inspirado en la colección Serpenti; la serpiente se usaba en el antiguo Egipto como símbolo de la realeza y de autoridad divina. También se inspiraron en la antigua deidad egipcia de Hathor, diosa que representaba lo femenino, la alegría y la maternidad y en el sol, que era adorado en el antiguo Egipto.
El nombre, Goldea, viene de la palabra “gold”, que significa oro y de “dea”, que significa diosa. El perfume es un tributo a Cleopatra, quien decía que era la encarnación de Hathor.
Para el diseño del frasco, que me parece divino, se inspiraron en el sol –de ahí el círculo dorado hecho con cristal– y en la joyería de Bulgari creada para la película de Cleopatra, donde la protagonista era Elizabeth Taylor.
Su familia olfativa es el almizcle floral. Es dulce, pero en ningún momento empalaga. Su salida es fresca, predomina el almizcle, la flor de azahar y la bergamota; su corazón es floral: Ylang ylang y jazmín dorado. Su fondo huele a ámbar y a pachulí. Es una dulzura cautivadora, sensual y elegante, sumamente sutil.
Para seguir con la línea egipcia, la creación del español Alberto Morillas incluye el olor a papiro. Su lista de creaciones es interminable, entre ellas está el ahora perfume de culto, One by Calvin Klein, e innumerables colaboraciones con Bulgari, Le Labo, Issey Miyake, Carolina Herrera y muchos más.
Goldea está disponible en su presentación de 90 ml en El Palacio de Hierro, su precio es de MX$2,150.
Digo adiós envuelta en el sofisticado aroma de Goldea. Lo amé.
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